Como cada año, el trinquet del Genovés honra la memoria de Arturo Bataller y su familia, que construyeron y gestionaron el recinto de la localidad de la Costera, donde se han formado infinidad de figuras de nuestro deporte, algunas de las cuales han sido las mejores de diferentes épocas.
Llega el Trofeu Familia Bataller por iniciativa del Ayuntamiento del Genovés en colaboración con la Fundació per la Pilota y la Fundación José Luis López, y para la ocasión se han programado dos jornadas de excepción con los pilotaris más destacados del momento en la modalidad del raspall.
El próximo viernes se completarán las dos semifinales. En la primera, Ian y Brisca se enfrentarán a Iván y Raúl.
La pareja ganadora de la Copa vuelve a reunirse, lo cual ya es sinónimo de garantía, para medir sus fuerzas ante una de las figuras locales, que estará acompañado por el joven resto de Ontinyent, que a está está siendo uno de los jugadores más decisivos del raspall y que viene de ganar el Trofeu Mixt Masymas.
A continuación jugarán Marrahí y Tonet IV contra Salelles II y Canari.
Aquí hay que destacar especialmente la presencia del número uno, que además juega en casa, aunque resulta igualmente destacable la presencia de los otros tres contendientes porque los nombres de Marrahí, Salelles II y Canari son de los que más se han repetido en las últimas citas de relevancia, como la Copa y el Trofeu Mixt Masymas, naturalmente por el excelente nivel que están ofreciendo desde hace meses.
Por lo tanto, jornada ‘de feria’ la del viernes en el trinquet del Genovés mientras que el colofón tendrá lugar el domingo por la tarde con la disputa de la final, partida que reunirá a los mejores entre los mejores. O sea, una confrontación de las cuales vale mucho la pena ser testigos en primera persona.