La Federación de Hockey de la Comunidad Valenciana ha presentado su nueva imagen corporativa en un acto celebrado en el polideportivo Virgen del Carmen-Beteró en el que ha servido para enseñar la renovación de su logo
Redacción El Polideportivo CV
El hockey valenciano cambia de look. La Federación de Hockey de la Comunidad Valenciano ha presentado, este jueves, su nueva imagen corporativa. Coincidiendo con la comida navideña del federación, las instalaciones municipales del polideportivo Virgen del Carmen-Beteró acogieron el acto de presentación de la renovación del logo que, desde 2003, acompaña a la FHCV como seña de identidad durante la expansión de nuestro deporte en las últimas dos décadas.
Jesús Gracia, presidente de la FHCV, dio a conocer la nueva imagen que pretende convertirse en una marca más cercana al hockey valenciano siguiendo la línea de profesionalización y la digitalización de nuestro deporte.
La senyera y el stick
Este logo contiene todos los elementos que hacen reconocible a nuestro deporte y el territorio que representamos: la bandera de la Comunitat Valenciana y el stick. Los ecosistemas digitales y la continua proyección tanto interior como exterior de la marca se ven representados en esta actualización de la identidad que gestiona el deporte del stick y la bola a nivel autonómico, adaptándose a nuevos formatos y sin perder la esencia del escudo original, siendo una marca reconocible.
Con la esencia del diseño anterior, el escudo conserva los sticks que forman nuestra bandera conservando su identidad con el reconocido palo de hockey que en conjunto presenta la bandera de nuestro territorio.
Tipografía y siglas
Las siglas actuales se insertaban en el logo de una manera ligeramente achatada ganando presencia y ofreciendo un aspecto más orgánico. Con el significa de la sigla ya establecido en la sociedad deportiva, la nueva identidad simplifica su lectura y apreciación del escudo que representa.
Incorporación del stick azul
La reducción de la cantidad de sticks, destaca un palo más visible, con el azul de la senyera valenciana que también coincide con el color de nuestro campo de hockey, pionero a nivel mundial desde 2008 y cogido como modelo e inspiración para las siguientes ediciones de los Juegos Olímpicos (Londres 2012, Río 2016 y Tokio 2020). Este cambio modificaba el sentido de las barras para darle más dinamismo al conjunto: las barras rojas y amarillas otorgan un efecto de movimiento al stick.
Esta actualización pretende un doble reto: mantener una identidad reconocible que respete los elementos originales y apostar por una imagen actual y estilizada de la Federación, con mejor adaptabilidad a formatos. La imagen refleja así esta institución: mantener nuestros símbolos y al mismo tiempo miramos hacia adelante, siempre en movimiento.
- Tipografía. Se evoluciona hacia una tipografía con mayor presencia y más orgánica, en lugar de la tipografía ligeramente achatada del anterior logo.
- Siglas. Se otorga todo el protagonismo del nombre a las siglas, un elemento reconocible. Por otro lado, se elimina el nombre completo de la Federación, que presenta dificultad en adaptaciones digitales, así como difculta la legibilidad en documentos de pequeño formato.
- Stick y barras. Para simplificar elementos y, al mismo tiempo, otorgar presencia al stick, se reduce la cantidad de sticks a uno, pero se le otorga otro color –azul– y, a cambio, se cambia el sentido de las barras de la bandera. Con ello, obtenemos un stick con mayor presencia, así como una sensación de bandera dinámica y, a la vez, de escudo cerrado, por la contraposición de las barras con el stick.
El nuevo logo de la FHCV parte de la premisa de mantener una identidad reconocible que respete los elementos originales: colores, siglas y forma, además del stick. Por otro lado, se ofrece una imagen actual y estilizada de la Federación, con mejor adaptabilidad a nuevos formatos, como los digitales. Con ello se pretende dar una imagen dinámica, sin cambios radicales, de la actual imagen y por tanto de la institución: una Federación que mantiene sus símbolos pero que se mueve, en la que el stick y las señas de identidad propia siguen siendo su brújula.