La valenciana cree que hay que saltar 6,90 para lograr una medalla y se ve capacitada para hacerlo
Redacción El Polideportivo CV
Fátima Diame estará en su primera final de un Campeonato de Europa al aire libre. No fue fácil y durante unos minutos estuvo fuera. Lo resolvió en el último intento, el tercero. El corte para meterse directamente, sin esperar a ver si estaba entre las doce mejores, estaba en 6,70 y la valenciana saltó… 6,70 (+0.3). Salió del foso, respiró y fue a abrazarse aliviada a su entrenador, Iván Pedroso.
Esta situación límite no es la primera de su carrera deportiva. Ha tenido otras. La antigua Fátima Diame solía desmoronarse ahí. Ahora no. Ahora es una de las mejores saltadoras del mundo y se crece para seguir entre ellas, tuteándolas. A la alemana Malaya Mihambo, que la dejó impresionada con un único salto de 7,03 y viento en contra (-1.3) o la italiana Larissa Iapichino, otra que solo necesitó un intento y que este miércoles competirá con la grada rugiendo por ella.
La atleta, que viene de ser medallista de bronce en el Mundial de Glasgow, en el mes de marzo, explicó cómo se desarrolló la clasificación. “La pista me estaba controlando más a mí que yo a ella (el pasillo es una tarima flotante que quien tiene la habilidad suficiente puede sacarle provecho para saltar más). Por mi forma de correr tenía que cambiar un poco la técnica en los primeros apoyos e ir más rápida. Es lo que estaba costando”.
Diame empezó con un salto de 6,50, siguió con otro de 6,28 y remató con el de 6,70. No se asustó. “He estado tranquila en una clasificación. Demasiado tranquila, diría yo. No he acusado los nervios. Me he encontrado bien, aunque hace dos días tuve un pequeño accidente haciendo pesas y la espalda la tengo un poco resentida y me ha costado un poco. Ahora resuelvo estas situaciones y es gracias a Iván. Sabe lo que me tiene que decir y lo soluciono, antes no me salía. Por eso voy más tranquila”.
La valenciana tiene claro donde estará el corte para subir al podio. “Para lograr una medalla habrá que saltar 6,90. Las alemanas saltan siempre con tarima y ya se ha visto que les va bien. Mihambo ha saltado siete metros muy fácil y Larissa (Iapichino, la italiana) la he visto muy bien. Creo que va a ser una final muy interesante y yo estoy para saltar esos 6,90. Estoy mejor que en Glasgow. Esa medalla me ha dado mucha confianza y tener a Iván también, siempre sabe qué decirme”.